La Tormenta Tropical Franklin azotó a la República Dominicana el miércoles, provocando pánico a los habitantes por las fuertes inundaciones y estragos ocasionados en todo el país, cobrándose la vida de un voluntario de la agencia de protección civil.
La persona fue identificada como Carlos Marino Martínez, quien perdió la vida en la ciudad de San Cristóbal mientras se dirigía a su trabajo. Presuntamente, otras dos personas resultaron heridas debido a un alud y fueron hospitalizados. Además, más de 300 personas se encontraban en albergues, mientras que otras 280 tuvieron que ser evacuadas de sus hogares para garantizar su seguridad.
Juan Manuel Méndez, director de operaciones de emergencia, instó a la población dominicana a tomar precauciones y mantenerse a salvo durante el paso de la tormenta, advirtiendo a la población sobre los peligros inminentes y pidió a todos que se refugiaran en sus hogares, casas de amigos o familiares, o en albergues oficiales.
La Tormenta provocó la caída de árboles y postes de luz, y varias viviendas resultaron afectadas por las inundaciones que convirtieron las calles en ríos. El techo de una vivienda en San Cristóbal colapsó, y los muros de varios edificios también se vieron dañados en todo el país.
Cabe resaltar que, el Programa Mundial de Alimentos de la ONU advirtió que unas 125.000 personas en República Dominicana viven en zonas extremadamente vulnerables a inundaciones y aludes debido a asentamientos pobres cerca de ríos y lagunas.
En este sentido, la Tormenta también arraso con el suministro de electricidad y agua en diferentes partes del país. Más de 99.000 clientes estaban sin electricidad y 56 acueductos dejaron de funcionar debido a las intensas lluvias, afectando a más de 927.000 personas.
Las autoridades cerraron escuelas, agencias gubernamentales y algunos aeropuertos en República Dominicana.
Países vecinos en alerta
Al mismo tiempo, la situación preocupaba a Haití, país vecino de República Dominicana. Haití es propenso a inundaciones catastróficas debido a la grave erosión en el área.
El primer ministro de Haití, Ariel Henry instó a la población a abastecerse de agua, alimentos y medicamentos. Además, debido a la violencia de pandillas en los últimos años, más de 200.000 personas se han visto desplazadas en Haití.
Las medidas de evacuación y búsqueda de refugio fueron implementadas en ambos países para garantizar la seguridad de la población.
Las autoridades en Puerto Rico también estaban en alerta debido a las lluvias provocadas por la tormenta. Se estaban llevando a cabo operativos de búsqueda para encontrar a dos buzos desaparecidos en aguas turbulentas en el sur de la isla.
Aunque la Tormenta Tropical Franklin ha dejado a su paso daños, las autoridades continúan trabajando arduamente para brindar asistencia, seguridad y apoyo a quienes se han visto afectados.
Con información de Nota de Prensa