Cada año, el 1 de diciembre, se conmemora el Día Mundial de la Lucha contra el Sida, es por ello que la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y el Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/Sida (ONUSIDA) destacaron el rol clave que tienen las comunidades y la sociedad civil de América Latina y el Caribe en la provisión de información y de servicios de pruebas, prevención y tratamiento del VIH.
“Que lideren las comunidades” es el lema del Día Mundial del Sida 2023 y subraya la función que tienen las organizaciones dirigidas por las poblaciones más desproporcionadamente afectadas por el virus de la inmunodeficiencia humana en la respuesta a esta epidemia de cuatro décadas, refiere la OPS en su portal oficial.
“Debemos reconocer el papel fundamental que desempeñan las comunidades en su compromiso y liderazgo para acelerar la respuesta al VIH”, afirmó el Dr. Jarbas Barbosa, Director de la OPS. “Hoy renovemos nuestro compromiso y apoyo a las comunidades para que lideren, mientras trabajamos juntos en eliminar el sida en la región de las Américas”, destacó.
Con la finalidad de apoyar la expansión de los servicios de VIH a las poblaciones clave y personas con VIH, la OPS y ONUSIDA llevan adelante la iniciativa ‘Soy Clave’ en 11 países de América Latina. La iniciativa ha permitido fortalecer alianzas que apoyan respuestas aceleradas con participación de las comunidades y de la sociedad civil impulsando así modelos de servicios centrados en las personas.
Es esencial que las comunidades estén empoderadas para que puedan desarrollar sus propias estrategias y llegar a quienes más lo necesitan con información, autopruebas de VIH, antirretrovirales como método de prevención (lo que se conoce como PrEP), y tratamiento para lograr una carga viral indetectable y cortar la cadena de transmisión.
“En América Latina y el Caribe alrededor de 2,5 millones de personas viven con VIH. En 2022, unas 130.000 personas adquirieron el virus y 33.000 perdieron la vida por causas relacionadas con el sida”, refiere la OPS.
Los avances en medicina y salud pública han permitido tener un diagnóstico rápido, métodos para una prevención combinada y un tratamiento eficaz contra el virus. Una persona infectada que adhiere al tratamiento ya no transmite el virus, mientras que una persona sana que toma PrEP tiene un 99% de protección frente al VIH.
La difusión de la información a las comunidades puede apoyar el aumento de la demanda de la PrEP, especialmente de quienes se encuentran en mayor riesgo de exposición. Además, a través del Fondo Estratégico de la OPS, los países de las Américas pueden adquirir la PrEP a precios asequibles, un apoyo fundamental frente a los limitados recursos de algunos ministerios de salud.
Con información de OPS
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