La Organización Mundial de la Salud (OMS) está lanzando un llamado urgente para la implementación de nuevas legislaciones que regulen el uso de smartphones y otros dispositivos digitales, con el objetivo de combatir el preocupante incremento de lo que se ha denominado como “uso problemático de la tecnología”.
Esta iniciativa fue presentada por Natasha Azzopardi Muscat, Directora de la División de Políticas y Sistemas de Salud de la OMS, quien subrayó la necesidad de crear normas que protejan a las generaciones más jóvenes.
Durante su intervención, Azzopardi Muscat enfatizó que las futuras regulaciones deberían “hacer limitaciones por edad y establecer zonas prohibidas”, planteando así un enfoque más rígido hacia la utilización de dispositivos en contextos donde la concentración y el bienestar social son prioridad: “Tal vez necesitemos pensar en dónde es apropiado utilizar los dispositivos digitales, y tal vez también sea hora de comenzar a pensar en lugares donde no se deberían usar ciertos dispositivos digitales”, comentó.
Hay una creciente preocupación sobre cómo el uso excesivo de la tecnología puede afectar el bienestar mental y emocional de los adolescentes, un asunto que la OMS ya había abordado con un estudio anterior que reveló que el 11% de los jóvenes encuestados se identificaron como usuarios problemáticos de redes sociales y videojuegos; estos patrones de uso están vinculados a consecuencias adversas, como problemas de salud mental, social y malos hábitos de sueño.
A medida que la preocupación sobre la salud digital sigue creciendo, se espera que estas nuevas reglas no solo limiten el acceso a la tecnología, sino que también fomenten una mejor educación digital para los jóvenes.
Azzopardi concluyó instando a la sociedad en general a reflexionar sobre la importancia de “no dejarse dominar por él”, abriendo así un debate esencial sobre el equilibrio que debe alcanzarse entre la vida digital y la realidad cotidiana.
Con información de Nota de Prensa
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