Este domingo en la tarde, se conoció la noticia del fallecimiento del expresidente de los Estados Unidos, Jimmy Carter, a los 100 años, en su residencia en Plains, Georgia; Carter, quien se encontraba en cuidados paliativos desde febrero de 2023, dejó una huella imborrable en la historia política y social de su país.
Jimmy Carter, el 39º presidente de Estados Unidos, gobernó entre 1977 y 1981, un periodo marcado por su enfoque en los derechos humanos, la justicia social y los valores democráticos; a pesar de enfrentar desafíos como la inflación y la crisis de los rehenes en Irán, su legado se fortaleció tras dejar la Casa Blanca.
En 2002, Carter fue galardonado con el Premio Nobel de la Paz por su labor humanitaria y su papel como mediador en conflictos internacionales; en Venezuela, su participación en el proceso de diálogo a principios de este siglo y la preocupación del Centro Carter por la situación política del país, dejaron una marca significativa.
Carter ganó las elecciones presidenciales de 1976 con la honradez y la sinceridad como estandartes, en un contexto de conmoción tras la guerra de Vietnam y el escándalo de Watergate, sin embargo, la crisis del petróleo y la toma de rehenes en la embajada en Irán limitaron su mandato a un solo periodo.
Tras su salida de la Casa Blanca, Carter regresó a su natal Georgia y se dedicó a promover la democracia y los derechos humanos a través del Centro Carter; en la ceremonia de entrega del Nobel, Gunnar Berge, presidente del comité, destacó: «Es probable que Jimmy Carter no pase a la historia de Estados Unidos como el presidente más eficaz. Pero sin duda es el mejor expresidente que ha tenido el país».
El pasado 1 de octubre, en su 100º cumpleaños, se le rindió un homenaje en vida, resaltando los logros de su presidencia y su incansable labor posterior.
Con información de Nota de Prensa
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