Este martes 15 de julio una mujer de 27 años y un niño de apenas 7 años, quienes se encontraban hospitalizados tras la deflagración de una bombona de gas en la concurrida calle Argentina de Catia el pasado sábado 12 de julio, perdieron la batalla contra las graves quemaduras sufridas.
Los fallecidoe se encontraban internados: la mujer en el Hospital Miguel Pérez Carreño y el niño en el pediátrico J.M. de los Ríos, luchando por sus vidas hasta este lunes.
Aquel día, la explosión sorprendió a más de 25 personas, según reportes oficiales del Cuerpo de Bomberos de Caracas, quienes además confirmaron que seis heridos fueron trasladados en ambulancias y el resto en vehículos particulares.
Además, el estallido causó daños materiales en puestos informales y dañó al menos dos vehículos que transitaban por la zona.
Investigaciones en curso señalan que la bombona de 45 kilogramos, con evidente deterioro en su fondo semielíptico, habría estado expuesta “a la intemperie por un tiempo considerable”, lo que disparó sospechas de que no se trató de un accidente espontáneo.
La alcaldesa de Caracas Carmen Meléndez declaró: “no es casualidad que la bombona haya sido puesta en ese lugar” y el Director del CICPC, Douglas Rico, afirmó que, “estamos investigando porque no es casualidad; vamos a investigar hasta las últimas consecuencias”
Las labores de emergencia incluyeron el cierre inmediato de la llave principal de gas por parte del Cuerpo de Bomberos y la movilización de diversos cuerpos de seguridad y Protección Civil, que coordinaron esfuerzos para estabilizar a los heridos y asegurar la escena.
Con información de Nota de Prensa
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