El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, ha definido las directrices estratégicas para el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y su movimiento juvenil (JPSUV), identificándolos como los principales articuladores de la voluntad colectiva y la dirección del Estado venezolano.
Durante el acto de clausura de la plenaria partidista, el jefe de Estado instó a la militancia a realizar un «esfuerzo extra en lo humano, en lo político, en lo colectivo», enfatizando que la Revolución debe ser concebida como un «apostolado de sacrificio permanente» en defensa de la libertad del pueblo y la existencia de la República.
Maduro reafirmó el principio fundamental de que «nosotros nacimos para vencer y no para ser vencidos», lo que subraya un compromiso inquebrantable con la soberanía nacional ante cualquier coyuntura. Entre las directrices más importantes, destaca la necesidad de consolidar orgánicamente los movimientos populares vinculados a las misiones sociales y a 27 sectores definidos que incluyen mujeres, clase obrera, campesinos, ecologistas, pueblos originarios, científicos, sexo-diversidad, afrodescendientes y trabajadores de la salud.
El plan incluye la intensificación de la campaña de motivación para lograr una participación masiva en las elecciones del 23 de noviembre y la meta de organizar 6.000 estructuras adicionales para 2026.
Para lograr estos objetivos, se contempla la realización de congresos, el fortalecimiento de diversos movimientos sociales, la conformación inmediata de 264 mil Comités Bolivarianos de Base Integral, y el establecimiento de un buró político permanente encargado del seguimiento de la coyuntura nacional.
Con información de Nota de Prensa
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