Bolivia amanece este sábado con un nuevo rumbo político y diplomático, con la toma de juramento de Rodrigo Paz Pereira como su flamante presidente, marcando el inicio de un mandato de cinco años.
La ceremonia de investidura simboliza el cierre de un ciclo de casi dos décadas dominado por el Movimiento al Socialismo (MAS), dando paso a un Gobierno de tendencia centrista.
En su discurso inaugural, el político centrista Paz Pereira se comprometió a abrir el país «al mundo», señalando una clara intención de redefinir la postura internacional y la agenda interna de la nación tras la larga etapa anterior.
Este juramento no solo sella un cambio de poder, sino que sienta las bases para una nueva era política y social en Bolivia.
Con información de Nota de Prensa
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