La competencia rústica 4×4 conocida como «Rusty Track Cabudare» se vio abruptamente interrumpida por una tragedia este fin de semana en El Palaciero, municipio Palavecino, cuando el aparatoso vuelco de la camioneta apodada «El Grinch», del equipo Cooz, cobró la vida de uno de sus ocupantes.
El incidente ocurrió mientras el vehículo era sometido a pruebas de velocidad con dos personas a bordo; en un momento crítico, el conductor perdió el control, desencadenando una serie de vueltas de campana. A pesar de que ambos participantes lograron ser despedidos del vehículo antes del violento giro, la pesada camioneta cayó directamente sobre uno de ellos, causándole la muerte de forma instantánea.
La víctima, un joven, fue trasladada al Ambulatorio Don Felipe Ponte Hernández, pero ya no presentaba signos vitales; este lamentable suceso, que provocó la suspensión inmediata del evento, ha vuelto a poner bajo la lupa la necesidad de medidas de seguridad rigurosas en los deportes extremos.
Aunque los volcamientos son comunes en la disciplina Rusty Track y generalmente sin consecuencias graves cuando se siguen las normas, versiones extraoficiales apuntan a una posible imprudencia fatal, el joven fallecido, que participaba con su propio vehículo, presuntamente realizó las pruebas sin el debido cuidado, específicamente sin el cinturón de seguridad ni el casco.
Adicionalmente, la polémica se agrava por la denuncia de que no había ambulancias disponibles en el lugar para proporcionar atención médica inmediata.
Con información de Nota de Prensa
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