19 de diciembre de 2025

Unión Europea y Mercosur: Un nuevo revés en el pacto comercial más largo de la historia

Tras un cuarto de siglo de complejas negociaciones, el histórico acuerdo de libre comercio entre la Unión Europea y el Mercosur ha vuelto a quedar en el aire, sufriendo un aplazamiento estratégico justo cuando su firma parecía inminente.

A pesar de que la rúbrica estaba programada para este próximo sábado en la cumbre de Foz de Iguazú, la Comisión Europea decidió postergar la votación ante la falta de una mayoría cualificada y la creciente presión política interna.

 Este bloqueo ha sido liderado principalmente por Francia, cuyo presidente Emmanuel Macron ha calificado los términos actuales de inaceptables, argumentando que el tratado carece de las garantías necesarias para proteger la economía europea.

A esta postura se han sumado naciones como Italia, Hungría y Polonia, formando un bloque crítico que exige la implementación de «cláusulas espejo» para obligar a los productores latinoamericanos a cumplir con los mismos estándares medioambientales y sociales que se exigen en el viejo continente.

La decisión de retrasar el pacto ocurre en un clima de alta tensión social, marcado por las masivas protestas de agricultores en Bruselas y diversos puntos de Europa, quienes denuncian una competencia desleal al enfrentarse a productos sudamericanos con costes de producción mucho menores y normativas menos restrictivas sobre el uso de pesticidas.

Mientras el sector agropecuario teme un hundimiento de sus mercados, los defensores del tratado resaltan su importancia geopolítica, pues crearía la zona de libre comercio más grande del planeta, abarcando a más de 700 millones de consumidores y una cuarta parte del PIB mundial.

En un contexto global de incertidumbre, marcado por la guerra comercial con China y las políticas arancelarias de Estados Unidos, el acuerdo se perfila como una herramienta vital para diversificar las exportaciones de maquinaria y vehículos europeos a cambio de materias primas; sin embargo, la resistencia política y la protección del campo europeo han vuelto a imponer un compás de espera que deja el futuro de esta alianza en una incógnita hasta el próximo mes.

Con información de Nota de Prensa

Foto Cortesía

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