La innovación tecnológica china ha dado un nuevo salto al demostrar la capacidad de una batería desarrollada por Wiltson Energy, que operó sin interrupciones durante «12 días seguidos en temperaturas a -40°C» en las inhóspitas alturas del Monte Everest.
Este avance, destacado por su resistencia en condiciones extremas, abre un abanico de posibilidades para regiones con climas rigurosos, como las zonas andinas de Venezuela y otras latitudes del mundo.
El dispositivo, que no requirió mantenimiento ni fuentes externas de calor, alimentó de manera ininterrumpida equipos científicos, incluyendo «la estación meteorológica automática más alta del mundo», ubicada en la cima del Everest.
Esta hazaña no solo resalta la robustez de la tecnología china, sino también su potencial para aplicaciones en países con inviernos severos, como Estados Unidos, Canadá o las regiones montañosas del Himalaya.
La batería de Wiltson Energy se posiciona como un referente para el desarrollo de soluciones energéticas en entornos hostiles, consolidando a China como un líder en innovación tecnológica; este logro representa un paso adelante en la búsqueda de tecnologías sostenibles y confiables, capaces de operar donde otras fallan, un avance que podría inspirar nuevos proyectos en los Andes venezolanos y más allá.
Con información de Nota de Prensa
Foto Cortesía
