En un esfuerzo por aliviar las tensiones comerciales, China y Estados Unidos anunciaron un acuerdo temporal para reducir significativamente los aranceles impuestos a productos de ambos países durante un período de 90 días.
La medida, que busca fomentar un comercio más equitativo, fue confirmada mediante un comunicado oficial emitido por la Casa Blanca.
Según lo acordado, Washington rebajará los aranceles sobre productos chinos de un 145% a un 30%, mientras que Pekín reducirá sus tasas de un 125% a un 10%; el Secretario del Tesoro de EE.UU., Scott Bessent, explicó que esta pausa arancelaria responde a un compromiso mutuo por evitar un distanciamiento económico: “Hemos llegado a un acuerdo sobre una pausa de 90 días y hemos rebajado sustancialmente los niveles arancelarios (…) ambas partes mostraron un gran respeto, ninguna de las partes quiere un desacoplamiento, queremos comercio. Queremos un comercio más equilibrado. Creo que ambas partes se han comprometido a conseguirlo”, afirmó Bessent.
Sin embargo, no todos los productos chinos se beneficiarán de esta reducción; el representante de Comercio de EE.UU., Jamieson Greer, aclaró que ciertos aranceles sectoriales, como los del 20% impuestos por el comercio de fentanilo, se mantendrán vigentes; “La tasa no incluye los aranceles sectoriales impuestos a escala mundial, por lo que algunos productos chinos seguirían sufriendo un impuesto elevado”, precisó Greer.
El acuerdo llega tras intensas negociaciones en las que China exigió a EE.UU. demostrar “sinceridad” para avanzar en las discusiones sobre aranceles; este paso representa una ventana de oportunidad para ambas potencias, que buscan estabilizar sus relaciones comerciales en un contexto global marcado por la incertidumbre económica.
Con información de Nota de Prensa
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