El Fiscal General de la República, Tarek William Saab, levantó su voz este lunes para condenar lo que calificó como una grave violación a los derechos humanos: el traslado y confinamiento de ciudadanos venezolanos en el Centro de Confinamiento de Terrorismo (CECOT) de El Salvador.
Desde la sede del Ministerio Público, en una rueda de prensa cargada de indignación, Saab afirmó que este acto reúne todas las condiciones para ser considerado un crimen de lesa humanidad, según lo estipulado en el Estatuto de Roma.
“Están todos los supuestos que, a bien, el Estatuto de Roma califica para que una acción sea calificada como crimen de lesa humanidad”, sentenció el fiscal, apuntando directamente a la discriminación como el eje de esta atrocidad.
Según explicó, los venezolanos enviados a este centro son señalados únicamente por su nacionalidad, sin pruebas concretas que sustenten los delitos que se les atribuyen.
Saab no escatimó en críticas hacia El Salvador, país que, al igual que Venezuela, es signatario del Estatuto de Roma; aseguró que las autoridades salvadoreñas han sometido a estos ciudadanos a tratos crueles, inhumanos y degradantes, violando flagrantemente los principios internacionales.
“Se les privó de su libertad sin habérsele comprobado los delitos que se le imputan”, recalcó, subrayando que este hecho constituye un incumplimiento directo de las normas que rigen a la Corte Penal Internacional.
El fiscal prometió seguir alzando la voz en defensa de los venezolanos afectados, dejando en el aire una pregunta que resuena con fuerza: ¿hasta cuándo se tolerarán estas injusticias?
Con información de Nota de Prensa
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