El mediocampista paraguayo Damián Bobadilla, del club brasileño São Paulo, se encuentra en el ojo de la tormenta tras ser acusado de proferir insultos xenófobos contra el venezolano Miguel Navarro, jugador del Talleres de Argentina, durante un partido por la fase de grupos de la Copa Libertadores.
El encuentro, disputado en el estadio MorumBIS, terminó con victoria 2-1 para los paulistas, asegurando su pase a octavos de final, mientras que Talleres quedó eliminado.
El incidente ocurrió al filo del minuto 84, tras el segundo gol del São Paulo, en un partido cargado de tensión; según un comunicado oficial del club argentino, Bobadilla habría insultado a Navarro llamándolo “venezolano muerto de hambre”, desatando la furia de los jugadores de Talleres y dejando al venezolano visiblemente afectado.
Navarro, entre lágrimas y con intenciones de abandonar el campo, expresó su dolor en redes sociales: “Nunca me avergonzaré de mis raíces. No hay lugar para el odio en el fútbol. Iré hasta las últimas consecuencias”.
Bobadilla, por su parte, utilizó sus redes sociales para ofrecer disculpas públicas; en un video compartido en Instagram, el paraguayo reconoció que tuvo “cruces de palabras” con Navarro, en los que fue “ofendido primeramente” y tratado con “un poco de desprecio”.
Admitió que, llevado por la “calentura” del momento, “reaccionó mal”. “No tuve la intención de discriminar a nadie. En la calentura reaccioné mal y pido disculpas públicamente. Si tengo la oportunidad de hablar con él en persona también le pediré disculpas”, expresó el jugador.
El São Paulo respaldó a su futbolista mediante un comunicado, destacando que Bobadilla no tiene antecedentes de conductas similares y que “a lo largo de su carrera” ha demostrado “profesionalismo”.
Sin embargo, el club no se pronunció de inmediato tras el partido, lo que generó críticas entre los aficionados.
Por su parte, Navarro no se quedó de brazos cruzados: Tras el encuentro, el venezolano acudió a una comisaría dentro del estadio para presentar una denuncia formal contra Bobadilla, dejando claro que buscará justicia por lo ocurrido.
El episodio ha reavivado el debate sobre el racismo y la xenofobia en el fútbol sudamericano, un problema que sigue empañando el espíritu deportivo.; desde Venezuela, se espera que este caso sirva para reforzar la lucha contra la discriminación en los estadios, mientras los ojos están puestos en las posibles sanciones que podrían recaer sobre el jugador paraguayo.
Con información de Nota de Prensa
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