Las intensas lluvias que azotan la región andina han dejado a Mérida incomunicada por carretera con los estados Barinas y Trujillo, tras tres días de desbordamientos de ríos e inundaciones que han golpeado a múltiples comunidades.
Las autoridades regionales confirmaron que el tránsito desde la capital merideña hacia estas regiones permanece suspendido, mientras se intensifican los esfuerzos para atender a las familias afectadas.
En un reporte emitido durante un programa radial, la periodista merideña Jade Delgado describió la gravedad de la situación en la zona de Mucuchíes, donde el acceso hacia Apartadero se ha vuelto prácticamente “imposible”.
Sin embargo, destacó el espíritu solidario de los habitantes: “La gente en estos pueblos se han unido muchísimo, les llevan alimentos, colchones, abrigos; hay muchos niños que recibieron abrigos porque está haciendo mucho frío. Tuve la oportunidad de ver que ha llegado bastante ayuda”.
El gobernador de Mérida, Arnaldo Sánchez, informó que las precipitaciones han impactado a más de 270 familias y 12 municipios de la entidad, dejando tras de sí un panorama de emergencia que ha movilizado al Gobierno Bolivariano.
En respuesta, se activó la Fuerza de Tarea Andes 2025, una operación destinada a brindar asistencia inmediata y mitigar los riesgos en las zonas afectadas.
El Ejecutivo Nacional ha desplegado un plan integral que incluye la distribución de alimentos, agua potable y enseres, así como la atención médica a los damnificados en Mérida, Trujillo, Táchira, Barinas y Portuguesa.
A pesar de la magnitud de los daños, las autoridades destacaron que, afortunadamente, no se han registrado pérdidas humanas.
La solidaridad de las comunidades y el esfuerzo coordinado del gobierno buscan devolver la estabilidad a las zonas afectadas, mientras se trabaja en la recuperación de las vías y la atención a quienes enfrentan las consecuencias de este embate de la naturaleza.
Con información de Nota de Prensa
Foto Cortesía
