En un curioso acontecimiento desconcertante, una anciana en Rumania utilizó durante décadas una valiosa pieza de ámbar, valorada en un millón de euros, como simple tope de puerta. este hecho insólito salió a la luz este martes, según informaron medios internacionales.
La mujer, sin sospechar el verdadero valor de la piedra, la encontró en el cauce de un arroyo y la usó como un objeto cotidiano, sin embargo, esta pieza de ámbar, que pesa 3,5 kilogramos, es una de las más grandes conocidas en el mundo.
El descubrimiento de su valor real se produjo cuando un familiar de la anciana, fallecida dos años después de la caída del régimen comunista en 1989, se percató de la posible importancia de la roca, tras investigar, el heredero confirmó que se trataba de una pieza semipreciosa de gran valor y decidió venderla al Estado rumano.
El gobierno de Rumania no tardó en clasificar el hallazgo como un tesoro nacional, dada su singularidad; posteriormente, la pieza fue cedida al Museo de Historia de Cracovia en Polonia para su estudio, donde se unirá a una colección dedicada a las piedras semipreciosas.
Con información de Nota de Prensa
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