Un altercado en el ala oeste de la Casa Blanca ocurrió el pasado jueves, cuando Elon Musk, jefe del Departamento de Eficiencia Gubernamental de EE.UU. (DOGE), y el secretario del Tesoro, Scott Bessent, protagonizaron una intensa «pelea a gritos» en presencia del presidente Donald Trump.
Según testimonios de dos testigos y tres fuentes cercanas al incidente, la disputa se originó en el Despacho Oval durante una reunión en la que se discutía la dirección del Servicio de Impuestos Internos de EE.UU. (IRS). El desacuerdo sobre quién debía liderar la agencia, con Musk apoyando a Gary Shapley y Bessent favoreciendo a Michael Faulkender, escaló rápidamente.
«Eran dos multimillonarios de mediana edad que creían que era la WWE en el vestíbulo del ala oeste», describió un testigo, refiriéndose a la intensidad del enfrentamiento. Aunque no hubo contacto físico, los involucrados estuvieron a punto de llegar a los golpes, siendo separados por un asistente.
El altercado llegó a oídos de la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, quien se encontraba de visita en la Casa Blanca ese día. La tensión entre Musk y Bessent había comenzado el 16 de abril, tras el nombramiento de Shapley como comisionado interino del IRS, decisión que contradecía las preferencias de Bessent.
Durante la confrontación, Bessent criticó a Musk por prometer recortes presupuestarios que no se habían materializado. Musk, por su parte, acusó a Bessent de ser un «agente de George Soros» y de haber dirigido «un fondo de cobertura fallido». La situación se intensificó con intercambios de insultos y gritos, generando un ambiente de caos en el ala oeste.
Finalmente, la disputa sobre el IRS se resolvió a favor de Bessent, con el anuncio de que Michael Faulkender asumiría el cargo. «Scott ganó esa ronda», afirmó una fuente, advirtiendo sobre el peligro de tener a Musk como enemigo.
Con información de Actualidad RT
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