El conflicto en la región se intensifica nuevamente tras la confirmación de la muerte de un conocido líder de la facción palestina Fatah, Jalil al Maqdá, en un reciente operativo militar por parte de Israel. El ataque tuvo lugar este miércoles en el sur del Líbano, específicamente en las cercanías de Sidón.
Informes preliminares indican que el Ejército israelí llevó a cabo un bombardeo aéreo a primera hora de la mañana que impactó el vehículo en el que viajaba al Maqdá. Según un comunicado emitido por las autoridades israelíes, esta acción forma parte de “una serie de eliminaciones de terroristas” en el área, lo que ha suscitado nuevas preocupaciones sobre la escalada de la violencia en la frontera.
Jalil al Maqdá no solo era un prominente jefe de Fatah, organización política que respalda a Mahmud Abás, sino que también ocupaba el cargo de general en las Brigadas de los Mártires de Al-Aqsa, una unidad militante vinculada al grupo. Su asesinato marca un punto clave en el conflicto, ya que se trata del primer caso registrado de un miembro de Fatah asesinado desde que estallaran las tensiones entre Israel y Hezbolá hace más de diez meses.
Mientras tanto, el ambiente sigue tenso en la frontera libanesa, donde las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han intensificado sus operaciones contra los comandantes de Hezbolá. Este reciente ataque podría tener implicaciones significativas en la dinámica del poder en la región y en los esfuerzos de mediación para alcanzar un cese de hostilidades.
Con información de Nota de Prensa
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