El Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dio a conocer este martes un avance crucial en su proyecto de defensa antiaérea conocido como “Cúpula de Oro”, un sistema diseñado para proteger el territorio estadounidense de amenazas como misiles balísticos intercontinentales, hipersónicos y de crucero.
Acompañado por el Secretario de Defensa, Pete Hegseth, el mandatario destacó que este plan, impulsado mediante una orden ejecutiva emitida en enero, marca un hito en la seguridad nacional de su país.
Inspirado en la “Cúpula de Hierro” que resguarda a Israel, el sistema estadounidense busca replicar y superar esta tecnología, combinando un avanzado escudo antimisiles con un radar capaz de detectar la trayectoria de proyectiles para alertar a la población sobre posibles impactos.
La “Cúpula de Hierro” ha sido clave en la defensa de ciudades israelíes, interceptando cohetes y neutralizando amenazas aéreas con alta precisión.
Sin embargo, el anuncio no ha sido bien recibido por las potencias mundiales: Los presidentes de Rusia, Vladímir Putin, y de China, Xi Jinping, calificaron el proyecto como una “nueva amenaza para la seguridad internacional”.
Ambos líderes coincidieron en que la iniciativa de Trump es “profundamente desestabilizadora”, al prever un sistema “sin restricciones, global, profundamente escalonado y multiesférico”; estas declaraciones reflejan la creciente tensión geopolítica ante el fortalecimiento militar de Washington.
El desarrollo de la “Cúpula de Oro” se posiciona como una prioridad para la administración Trump, en un contexto global donde la carrera armamentística y las disputas estratégicas entre grandes potencias continúan intensificándose.
Por ahora, no se han revelado detalles adicionales sobre los plazos o el alcance final del proyecto, pero su anuncio ya genera un intenso debate en la arena internacional.
Con información de Nota de Prensa
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