La Tormenta Lee llegó con fuerza el pasado sábado a Nueva Inglaterra y Canadá, golpeando, dejando a su paso destrucción y caos.
Con vientos destructivos, fuertes olas y lluvias torrenciales, la Tormenta derribó árboles, inundó carreteras y dejó sin electricidad a decenas de miles de familias de una extensa franja en Nueva Inglaterra y la costa del Atlántico canadiense.
Según medios locales, este desastre natural dejó una persona fallecida en Maine cuando la rama de un árbol cayó sobre su vehículo. Lamentablemente, el automovilista de 51 años, se encontraba desplazándose en su vehículo por la carretera federal 1 durante un periodo de intensos vientos, lo cual originó que una rama cayera sobre el auto. Los trabajadores tuvieron que cortar las líneas eléctricas antes de poder rescatar al hombre, quien fue posteriormente declarado fallecido en el hospital.
El vórtice de este enorme ciclón postropical tocó tierra alrededor de 215 kilómetros al oeste de Halifax, la capital de Nueva Escocia, según informó el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC). Con vientos sostenidos de 110 km/h, la Tormenta fue debilitándose a medida que avanzaba hacia Nuevo Brunswick y el Golfo de San Lorenzo.
Paso de Lee deja desastres
En Estados Unidos se emitió una advertencia de Tormenta tropical en un tramo de 370 kilómetros desde Portsmouth, Nueva Hampshire, hasta el extremo este de Maine. Esto incluía Bar Harbor, la puerta de entrada turística al Parque Nacional Acadia, donde un barco de observación de ballenas se soltó de su amarre y terminó estrellado en tierra frente al College of the Atlantic, una universidad de Bar Harbor. Las autoridades trabajaron rápidamente para evitar que más de 6,800 litros de diésel se derramaran en el océano.
En Nueva Escocia, Lee inundó carreteras costeras, derribó líneas eléctricas y árboles, y dejó fuera de servicio a los transbordadores. Esto ha generado una gran preocupación en la región, que aún se está recuperando de los incendios forestales y graves inundaciones que ocurrieron este verano. Además, el aeropuerto Halifax Stanfield International no tenía vuelos programados para el sábado.
La Tormenta también afectó a Nuevo Brunswick y la Isla del Príncipe Eduardo, donde se emitieron advertencias de Tormenta tropical y huracán. Los vientos huracanados se extendieron hasta 220 kilómetros desde el centro de Lee, mientras que los vientos con fuerza de Tormenta tropical tuvieron un alcance de hasta 630 kilómetros, afectando a Maine y gran parte de las provincias marítimas de Canadá. Los cortes de electricidad afectaron a varios cientos de kilómetros alrededor del centro de la Tormenta.
Medios locales indican que, se pronosticó que la Tormenta generaría una marejada ciclónica de 30 a 90 centímetros en la costa de Maine, acompañada de olas grandes y destructivas. Además, se esperaban hasta 10 centímetros de lluvia en partes de Maine, Massachusetts, Nueva Escocia y Nuevo Brunswick hasta el sábado por la noche, lo que podría causar inundaciones locales.
Con información de Nota de Prensa
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