El departamento colombiano de Arauca, en la frontera con Venezuela, vivió una jornada de violencia con cinco atentados contra dos oleoductos, un ataque con granada y disparos contra un comando policial.
La empresa Cenit, filial de Ecopetrol, informó que activó un plan de emergencia tras los ataques a los oleoductos Caño Limón–Coveñas y Bicentenario: “Cenit y Ecopetrol rechazan estas acciones ilícitas y hacen un llamado para que cesen los delitos contra la infraestructura que ponen en riesgo la integridad de las personas, generan graves consecuencias al medioambiente y afectan las actividades de las comunidades”, declararon.
El ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, condenó el “atentado terrorista” y afirmó que estos actos no fortalecen a los ilegales ni logran presionar al Estado; el Ejército colombiano se encuentra en la zona afectada para garantizar la seguridad y permitir las reparaciones necesarias.
El alcalde de Arauca, Juan Quenza Ramos, expresó su preocupación por la violencia en el departamento, señalando que “son más de 800 muertos en menos de dos años”, hasta el momento, ni el Ejército de Liberación Nacional (ELN) ni las disidencias de las FARC se han atribuido los atentados.
Con información de Nota de Prensa
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