La segunda fase de la Operación de Liberación Cacique Guaicaipuro realizada por el gobierno venezolano que tiene como objetivo la búsqueda, persecución y captura de los reos que lograron evadirse de la cárcel intervenida hace una semana por las autoridades, ha logrado un gran avance.
En esta ocasión, funcionarios de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) lograron detener a un reo acusado de homicidio y robo que intentaba fugarse a Colombia. El hombre, identificado como Eduard José Alvarado Manzanares y apodado “El Eduarda”, fue arrestado en el poblado de Chururu, en el estado Táchira, cerca de la frontera colombiana.
El general Domingo Hernández Lárez, comandante estratégico operacional de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, informó sobre la captura de Alvarado Manzanares, quien estaba prófugo de la cárcel de Tocorón, donde cumplía condena por homicidio calificado, robo genérico y comercio de sustancias estupefacientes y psicotrópicas. Asimismo, se detuvo al conductor del vehículo en el que intentaba escapar hacia Colombia, identificado como David López, y a su pareja, Lorena Blanco. Ambos estaban ayudando al prófugo en su intento de huida.
El general Hernández Lárez destacó que esta captura forma parte de la operación Cacique Guaicaipuro, cuyo objetivo es desarticular y poner fin a las bandas delincuenciales organizadas que operaban en Tocorón.
El arresto fue notificado al Ministerio Público, según las autoridades.
Más detenciones
Al exprófugo “El Eduarda”, también se le suman dos miembros de la banda criminal El Tren de Aragua, que fueron detenidos en el estado central de Carabobo.
Estos reos, identificados como Jhoswar Saúl Hernández Sanabria, alias “El Saúl”, y Luis Felipe Colmenares Mojica, alias “El Pipe”, también estaban prófugos de la cárcel de Tocorón y eran considerados dos de los criminales más buscados en Cúcuta, Colombia.
Según reportes locales, “El Saúl” lideraba una célula de El Tren de Aragua en la capital del departamento Norte de Santander y se le relaciona con al menos 50 homicidios.
Por su parte, “El Pipe” era su lugarteniente y las autoridades colombianas ofrecían una recompensa de 10 millones de dólares por su captura.
Con información de Nota de Prensa