El poder de la naturaleza se puso de manifiesto en un atolón de las Islas Marshall, donde una serie de potentes olas derribó las puertas de un cuartel militar que los Estados Unidos mantiene en el archipiélago de Oceanía.
Los hechos ocurrieron la noche del sábado, cuando el fuerte oleaje que provocó una tormenta marina afectó a la isla Roi-Namur, ubicada al norte del atolón Kwajalein, uno de los más importantes de la pequeña nación, considerado territorio norteamericano de ultramar.
Las imágenes muestran a un grupo de trabajadores del ejército estadounidense tratando de ponerse a salvo segundos antes de que la fuerte marejada arrasara con las puertas y el mobiliario del cuartel.
De acuerdo con el mando militar de la isla, solo un soldado resultó herido, debido a los materiales que arrastró el agua. Su estado se reporta estable mientras se recupera en un hospital de la isla de Kwajalein.
Con información de Nota de Prensa
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