El Museo de Tecnología de Estocolmo, Suecia, exhibió una estatua creada por tres programas de Inteligencia Artificial (IA) que mezcla el estilo de cinco grandes escultores en el mundo.
La empresa que diseñó esta obra fue Sandvik, la cual la tituló como “la Estatua Imposible”, ya que une el estilo artístico de cinco escultores que jamás podrían trabajar juntos. “Una verdadera estatua creada por cinco maestros distintos que nunca habrían podido colaborar en la vida real”, expresó la portavoz de la empresa, Paulina Lunde.
Dicha estatua es de acero inoxidable, mide 150 centímetros de alto y pesa 500 kilos. Representa a una mujer, cuya mitad del cuerpo debajo del busto está cubierta por una especie de túnica y lleva un globo, que es hecho de bronce, en su mano izquierda.
“Algo en su apariencia hace sentir que no fue creada por un ser humano”, señala Julia Olderius, una responsable de innovación dentro del museo.
La idea de la empresa fue crear una mezcla entre los estilos de cinco escultores que marcaron cada uno su época, los cuales son Miguel Ángel (Italia, 1475-1564), Auguste Rodin (Francia, 1840-1917), Kathe Kollwitz (Alemania, 1867-1945), Kotaro Takamura (Japón, 1883-1956) y Augusta (Estados Unidos, 1892-1962).
¿Cómo hicieron posible esta creación?
Para lograrlo, los ingenieros de Sandvik alimentaron el programa con abundantes imágenes de esculturas creadas por estos artistas. La inteligencia artificial propuso luego varias imágenes en 2D que, según ella, reflejaban el sello de cada uno de estos escultores.
“Estas imágenes en 2D fueron incorporadas por nuestros ingenieros en un modelado 3D y, a partir de ahí, nos concentramos en la fabricación”, destaca Lunde.
Como resultado, pudieron crear una obra que mezcla varios estilos de escultores de diferentes épocas y hacer posible, a través de la IA, una estatua que tenga la esencia de los artistas reconocidos.
Con información de Nota de Prensa
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