El mercado financiero del régimen israelí atraviesa una tormenta económica tras registrar pérdidas de 40 mil millones de shekels, unos 11 mil millones de dólares, a causa de la guerra arancelaria desatada por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Así lo reportaron medios locales, que señalaron un desplome cercano al 4 % en los principales índices de la bolsa de Tel Aviv, sumiendo al sector en una crisis sin precedentes.
El origen del descalabro está en los nuevos aranceles del 17 % impuestos por Washington, una medida que, según estimaciones, podría costarle a Israel unos tres mil millones de dólares al año; este golpe económico ha debilitado aún más el shekel y ha puesto en jaque la estabilidad financiera del país, con la inflación disparada por encima del rango meta del 1 al 3 % establecido por el gobierno.
En medio de este panorama, el Banco de Tel Aviv optó por mantener las tasas de interés en 4,5 %, marcando la décima vez consecutiva sin cambios, una decisión que analistas vinculan al “debilitamiento del shekel”, según destacó Venezolana de Televisión en su segmento de Internacionales.
Expertos advierten que esta política de tasas fijas busca contener el deterioro, pero enciende las alarmas sobre un posible aumento descontrolado de los precios.
“Por lo tanto, ese escenario exacerba los temores sobre el impacto en la inflación, que ya sobrepasa el objetivo gubernamental”, coincidieron los especialistas, mientras el régimen sionista enfrenta las consecuencias de un conflicto comercial que amenaza con prolongar su agonía económica.
Con información de Nota de Prensa
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