En un lamentable suceso, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) ha confirmado la muerte de 38 personas después de un naufragio ocurrido a tan solo 200 metros de la costa de Godoria, cerca de Obock en el noreste de Djibouti, el trágico evento tuvo lugar en las primeras horas del pasado 8 de abril, destacando la peligrosidad de uno de los corredores humanos más riesgosos de África.
Según medios internacionales los equipos de la OIM respondieron rápidamente, llegando al sitio del desastre para asistir en las operaciones de búsqueda y rescate; los sobrevivientes recibieron alimentos, agua, primeros auxilios y apoyo psicosocial, entre otras formas de ayuda. Se cree que los migrantes, que intentaban regresar de Yemen a Djibouti tras un fallido intento de alcanzar Arabia Saudita, se enfrentaron a una de las rutas más activas y mortales del continente.
El comunicado de la OIM resalta la presencia de menores entre las víctimas y señala que aún hay cinco migrantes están desaparecidos, la organización aprovecha este triste momento para llamar la atención sobre la falta de atención y financiamiento internacional que recibe este corredor, a pesar de la creciente cifra de muertes.
Tanja Pacifico, jefa de misión de la OIM en Djibouti, ha hecho un llamado urgente por más apoyo para prevenir la pérdida de vidas humanas y para proporcionar mayor asistencia a países como Djibouti. Anualmente, cientos de miles de personas del Cuerno de África emprenden el peligroso viaje, abandonando el continente con la esperanza de una vida mejor en Arabia Saudita o en otras naciones del Golfo Pérsico.
Con información de Nota de Prensa
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